Hoy día 23 de Abril, se regalan rosas y libros en Cataluña. No es algo novedoso, pues es algo que
se lleva haciendo desde el siglo XV que se organizaban ferias de rosas a la que acudían sobre
todo novios o matrimonios jóvenes. Este día es uno de los más importantes para la cultura
catalana, Sant Jordi, patrón de Cataluña, murió años atrás en este mismo día, sin saber que se
convertiría en toda una celebración, en donde además de rosas y libros se cubren todos los
balcones de la ciudad de rosas, la Rambla se llena de libreros y floristas y se celebra lo conocido
como amor y también la cultura sobre todo la catalana, porque muchas de las ventas que se
realizan son libros en su lengua materna. Esto queda evidenciado en los números de ventas que
este año estuvieron lideradas por “Si la memòria no ens falla” o “Les nostres mares”.
Es algo admirable que se continúe la celebración de este día aunque a veces pueda ser algo
irónico porque Sant Jordi con palabras un tanto exageradas, mató a un dragón y ahora se venden
flores en su día, aunque según la leyenda es porque de la sangre del dragón surgió una rosa.
Es algo bonito, nunca dejará de ser algo bonito las celebraciones del cariño o amor entre los
seres humanos. Según la tradición, los hombres regalaban una rosa y las mujeres un libro a
estos, aunque hoy en día se regala sin estereotipos y de forma equivalente.
Para mí, Sant Jordi es San Valentín pero “bien”, seguramente ambas celebraciones están
corrompidas por el capitalismo y consumismo, soy consciente pues, evidentemente el estado y
el sistema se tienden a aprovechar de cualquier cosa, hasta uno de los mayores actos de
intimidad del ser humano como es el amar.
Aun siendo consciente de esto, para mí siento que este día es el intercambio no solo del amor,
sino el amor por el conocimiento y el intercambio del conocimiento, la naturaleza, afecto y
admiración.
Regalar un libro es un detalle mucho más allá de algo material, pues es en parte hacer el
esfuerzo de cognitivo de pensar y procesar qué tipo de libro, que autor o que tipo de literatura le
puede gustar a la persona que quieres, es un intercambio del entendimiento entre dos seres
humanos, sus maneras de pensar, de ver o de concebir el mundo. Algo que, bajo mi punto de
vista, es realmente bonito.
El amor, puede ser algo complicado o no, no lo sé con certeza, pero siento que a veces el celebrar
que quieres a alguien es admirable. Sentir y demostrar que sientes, querer y demostrar que
quieres, pensar en alguien sin miedo a evidenciar que piensas en alguien. Es complicado creo o
al menos no percibo que esto se haga con frecuencia hoy en día, siento que todo es superficial o
artificial y que se entiende que es mejor esconder todo lo que sentimos, pues en parte es
beneficiario, porque sentir para bien o para mal puede reducir nuestra productividad con y para
el sistema, pero bueno, sin referirme a eso creo que con frecuencia demostrar afecto a los
demás, es definitivamente un símbolo de debilidad o excesiva sensibilidad, cuando opino, que es
todo lo contrario.
Con todo, soy consciente que un libro o una rosa no demuestran todo lo anterior en su totalidad,
sin embargo, leer que se regalan más libros o que un mayor número de personas observa la casa
Batlló bajo el rojo de las rosas, me hace algo feliz, sin saber de todo el por que pero siento, que el
resto tambien sienten y que demuestran que celebran que sienten.
Tal y como dijo Shakespeare:
«El amor, como ciego que es, impide a los amantes ver las divertidas tonterías que cometen«
Y qué más divertido hay en pensarte días pensando en que le regalaras a la persona que quieres,
sin tener que ser el mejor libro o el más caro o el más importante de la literatura universal, pero
a mi me resulta simpático poder pensar en algo para la persona que admiro, y en poder
celebrarlo con algo tan simple como una rosa o un libro, que para mí son mucho más que eso.
Pero, esto al igual que como ocurre con todo, para gustos colores.
«El amor nunca hizo ningún cobarde» Miguel de Cervantes
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